Dentro del escenario de Creative Land, una de las tierras de Talent Land, Mayra Hernández, quien es una pintora “tradicional mexicana” como ella se hace llamar, nos relata su historia para convertirse en una de las pocas pintoras profesionales en México que aún realiza sus pinturas al óleo (técnica pictórica consistente en mezclar los pigmentos a base de aceites).
A la edad de cinco años, debido a una enfermedad que le impedía estar por mucho tiempo bajo el sol, ella tuvo que encontrar nuevas formas de juego dentro de su casa; una de esas actividades fue realizar dibujos, los cuales la llevaron a estudiar pintura y tomar diferentes cursos y talleres hasta lograr especializarse en la animación análoga.
Realizo estudios de animación en Reino Unido, en Londres de arte y diseño; cuando termino sus estudios regresó a México, sin embargo, se dio cuenta que los trabajos enfocados en la animación tradicional eran mal pagados y poco valorados, por tal motivo, existió un momento de confusión en su vida sobre si había elegido la carrera correcta; gracias a las palabras de un amigo cercano quien la motivo a no desistir, ella eligió ser freelance.
Comenzó a trabajar en animaciones pintadas al óleo y a difundirlas en redes sociales, es así como uno de sus primeros trabajos titulado “Separate Lives” llego a ser nominado al New Talent Award en los premios BAFTA Scotland 2015. Tiempo después trabajó en el video “Beautiful Girl” del grupo mexicano Triciclo Circus Band; gracias a estos proyectos llego a ser seleccionada para colaborar en el proyecto de “Loving Vincent” —“Cartas de Van Gogh”—, un largometraje dirigido por Dorota Kobiela y Hugh Welchman, en un principio ellos planearon filmarse a ellos mismos, poco después y gracias al apoyo económico que recibió el proyecto, se prefirió filmar todo con actores reales y posteriormente pintar la cinta con técnica similar a la de Vincent Van Gogh, mediante la ayuda de varios pintores de diferentes nacionalidades —entre ellos Mayra—, se logró terminar la película, la cual es una muestra de la belleza de la pintura a mano combinada con la tecnología del talento creativo.
Todas nuestras acciones son pequeñas semillas que plantamos a lo largo de nuestro camino, esta en nosotros cuidarlas y alimentarlas, puede que algunas no lleguen a crecer pero ten por seguro que, con perseverancia y optimismo tarde o temprano veras crecer y convertirse en un árbol alguna de ellas, así que, sigue intentando hasta conseguirlo (Mayra Hernández).
