En la noche, los campuseros se dividieron en dos bandos: aquellos que la fiesta y la emoción les corría por las venas y los del deseo de un momento de paz en el camping; descansar era ya obligatorio.
Foto: Alejandro Jáuregui
Los Campuseros full energy, se resistían a retirarse de las conferencias, sin embargo el ambiente dijo adiós a cualquier oportunidad de visitar a Morfeo con la competencia de DJ en el escenario principal, aún así lo insólito de la noche fue lo que todos los campuseros hablan, la torre que se hizo con las cajas de pizza.
Comenzó siendo un juego entre pocas personas y se convirtió en la atracción nocturna, en la que participan los campuseros que se habían alimentado de dicha comida.
Jenga+Pizza= Pizzajenga Campusero. 100 cajas de pizza apiladas, un record (no) mundial. #CPMX7 pic.twitter.com/oOAnusoU3I
— Jalisco Campus Party (@Campuspartymx) June 30, 2016
Al grito de “una más” o “cinco más” la torre creció. Al caer, la diversión continúo, pues los campuseros iniciaron una especie de guerra de comida lanzando los restos de pizza y las cajas por todas partes.
1:11am, Día 1 96 cajas de pizza, 1 dron #cpmx7 #campusparty #gdl
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El bando de los campuseros cansados ya se disponían a bañarse con agua caliente disponible en las regaderas del evento y tratar de conciliar el sueño ante el gran ruido que sus otros compañeros llevaban a cada rincón del camping. Los fiesteros les cantaban Las Mañanitas a quienes ya estaban dormidos.
Foto: Natalia Martin
