Vivian Lan Agamí presentó su conferencia acerca del futuro de la educación, habló de cómo la tecnología iba encaminada a ser protagonista para el sistema y la forma en la ésta que crece al paso de los años.
Japón es un país donde la robótica está muy avanzada, un gran ejemplo de esto es el robot ASIMO, que gracias a su diseño puede ayudar a personas con capacidades diferentes y se puede comunicar con lenguaje y signo.
Sin embargo, muy pocos conocen a Marco Mascarro, un mexicano proveniente de San Luis Potosí que creó un robot que le ayuda a la gente a realizar sus compras en el supermercado.
“Qué podemos hacer todos nosotros si juntamos nuestras capacidades y habilidades”, fueron las palabras de Lan Agamí luego de poner de ejemplo a Mascarro, un mexicano que exporta robots a Japón.
Vivian nos habló de Watson, una tecnología que proporciona mayor exactitud en los diagnósticos y tratamientos del cáncer de pulmón; un doctor tiene una probabilidad del 50% en acertar sobre el tratamiento, mientras que Watson tiene una probabilidad mayor al 90%.
Por último, nos habló sobre la impresión 3D y sus beneficios: gracias a ella se puede producir desde ropa hasta casas, con un valor de 5,000 dólares, lo que hace posible para personas de escasos recursos adquirir una casa.
“Imagina que un día que viajes no lleves ropa y en el lobby del hotel hay una impresora 3D en dónde puedes escoger el diseño de tu ropa e imprimirla”.
Si hoy en día podemos hacer todo esto, ¿Qué seriamos capaces de hacer en un futuro en la ámbito de la educación?. Debemos experimentar constantemente sobre el sistema educativo sin importar el tiempo que se tome en ello.
Actualmente, en los primeros 12 años de vida de un ser humano lo enseñamos a caminar y hablar; para después, pasar otros 12 años diciéndole que se siente y se calle y, finalmente, exigirle que entre a la universidad y recupere su creatividad. Con palabras similares a éstas, Lan Agamí concluyó su conferencia.
Dinos, ¿cómo piensas que será la educación en un futuro?
